En el marketing digital el contenido evergreen es muy importante porque es el tipo de contenido que sigue siendo útil y relevante sin importar cuánto tiempo pase. Es como una planta que siempre está verde: no se “marchita” ni deja de ser interesante con los meses o los años.. Pero, ¿Qué significa realmente que un contenido sea evergreen y cómo podemos aprovecharlo para nuestra estrategia de contenido?
Aprovechar este tipo de contenido en tu estrategia es clave porque, al ser útil durante mucho tiempo, puede seguir atrayendo visitas, compartidos y lectores sin que tengas que actualizarlo constantemente. Esto lo convierte en una inversión inteligente para hacer crecer tu página web o blog. ¡El contenido evergreen es como un regalo que sigue dando resultados!
¿Qué es el contenido evergreen?
El contenido evergreen es aquel que, a pesar del paso del tiempo, no pierde su vigencia ni su capacidad de interesar a la audiencia. Se caracteriza por ser atemporal, relevante y de interés continuo, lo cual le permite seguir atrayendo tráfico y generando interacción mucho tiempo después de su publicación.
Este tipo de contenido suele abordar temas fundamentales y educativos, resolver dudas comunes o proporcionar recursos útiles que no están sujetos a cambios frecuentes. Al mantenerse fresco y actual, el contenido evergreen ayuda a establecer la autoridad de una marca y mejora su posicionamiento SEO.
¿Cuáles son las ventajas del contenido evergreen?
El contenido evergreen es duradero porque no pasa de moda ni queda desactualizado, por lo que sigue siendo útil durante meses o años, convirtiéndose en una inversión a largo plazo.
Además, genera tráfico constante, ya que responde a preguntas o necesidades comunes, lo que hace que las personas sigan buscándolo y visitando tu web con el tiempo; por ejemplo, un artículo sobre “cómo organizar tu tiempo” sigue siendo relevante hoy y en varios años.
También ayuda al posicionamiento en Google, porque al mantenerse vigente y ser útil, los buscadores lo premian manteniéndolo en buenos puestos, lo que te permite atraer visitas orgánicas (sin pagar publicidad) de manera constante.
Ofrecer contenido evergreen fortalece tu marca, ya que te posiciona como una fuente confiable y experta, aumentando la credibilidad de tu negocio. Otra ventaja es que requiere poco mantenimiento, porque no necesita ser actualizado con frecuencia, solo revisado de vez en cuando para asegurarte de que todo sigue en orden.
Por último, es muy compartible, ya que nunca pasa de moda y las personas pueden recomendarlo o difundirlo en redes sociales en cualquier momento, lo que te ayuda a llegar a más público.
¿Cómo crear contenido evergreen efectivo?
Para crear contenido evergreen efectivo, es fundamental enfocarse en la calidad y la relevancia. A continuación te muestro algunos consejos que sigo yo para crear mi contenido (este post es un gran ejemplo de contenido evergreen, es algo que siempre se buscará igual, que no depende de tendencias ni de búsquedas estacionales):
Primero, elige los temas adecuados. Identifica temas que sean útiles y relevantes para tus clientes, y que mantengan su interés con el tiempo. Haz una investigación de palabras clave, buscando términos con un volumen de búsqueda estable y que no dependan de modas pasajeras.
Herramientas como Google Keyword Planner, SEMrush o Ahrefs pueden ayudarte.
También puedes responder a preguntas frecuentes de tus clientes o enfocarte en necesidades comunes como “guías de compra”, “cómo elegir un producto” o “consejos prácticos”.
Por ejemplo, si tienes una tienda de ropa online, un tema evergreen podría ser: “Cómo elegir la talla perfecta para comprar ropa online”. Si tienes una tienda física de electrodomésticos, un buen tema podría ser: “Guía para elegir la mejor lavadora según tus necesidades”.
Luego, crea contenido de alta calidad. Para que tu contenido sea duradero, debe ser útil, claro y bien organizado. Usa títulos y subtítulos (H1, H2, H3) para dividir la información, añade ejemplos o casos prácticos, y responde de forma completa a las dudas que pueda tener tu cliente.
Por ejemplo, si tienes una tienda de bicicletas, un buen contenido podría estructurarse así: una introducción breve sobre la importancia de elegir la bicicleta adecuada, una explicación detallada sobre los diferentes tipos de bicicletas, consejos prácticos como cómo medir la altura correcta para una bicicleta, y una conclusión con una llamada a la acción para visitar tu tienda (física u online).
No olvides optimizar para SEO. Usa una palabra clave principal en el título, subtítulos, texto, meta descripción y URL. Asegúrate de que el contenido sea suficientemente extenso. No hay un mínimo ni un máximo de palabras que debas incluir, se supone que debes escribir exactamente las palabras que sean necesarias para resolver la intención de búsqueda, pero si te fijas en los primeros 3 resultados por ejemplo verás más o menos que extensión tienen y podrás usarlo de guía (ojo, coge esto con pinzas, pues esos resultados están en top 3 por cosas que no son la extensión de su contenido, pero como guía si no sabes cuan largo debe ser tu contenido puede servirte)
Incluye imágenes optimizadas (por ejemplo, fotos de productos) con etiquetas alt relevantes, y agrega enlaces internos a otras páginas de tu web (como categorías de productos) y enlaces externos a fuentes confiables si es necesario.
Haz que tu contenido sea visual y fácil de leer. Usa listas, viñetas o tablas para organizar la información y añade gráficos, fotos de productos, videos o tutoriales para hacerlo más atractivo. Divide los párrafos largos en bloques cortos para que sea más fácil de leer.
Por ejemplo, una tienda de calzado puede usar una tabla comparativa para mostrar las ventajas de cada tipo de zapato según el uso (deportivo, casual, formal).
Además, asegúrate de que el contenido sea útil y práctico. Responde directamente a las necesidades del cliente sin rodeos ni relleno.
Por ejemplo, si tienes una tienda de productos de jardinería, podrías hacer un artículo titulado: “Cómo elegir las mejores herramientas de jardinería para principiantes”.
Ofrece soluciones claras, añade datos (como materiales recomendados o precios aproximados), y cierra con un CTA que invite al cliente a visitar tu tienda, suscribirse a tu boletín o descargar una guía.
Aunque sea evergreen, actualiza tu contenido periódicamente. Revisa cada 6-12 meses para actualizar datos o tendencias si fuera necesario.
Por ejemplo, en un contenido sobre “Cómo elegir el mejor televisor”, podrías incluir nuevas características que hayan salido en los modelos recientes. También es importante corregir enlaces rotos y añadir nuevas secciones si enriquece el contenido.
Por último, promociona tu contenido de forma constante. No basta con publicarlo y olvidarlo. Comparte el contenido periódicamente en redes sociales, inclúyelo en tus newsletters o correos automatizados, o transforma el contenido en otros formatos como videos (por ejemplo, un tutorial en YouTube) o infografías que puedan ser compartidas fácilmente.
Finalmente, mide y ajusta los resultados. Usa herramientas como Google Analytics o Search Console para analizar el tráfico y el rendimiento del contenido. Si notas que las visitas o el interés bajan, revisa y ajusta el contenido. Por ejemplo, si tu artículo sobre “Cómo elegir el mejor sofá para tu sala” está perdiendo tráfico, podrías añadir nuevas tendencias de decoración o enlaces a productos que vendes en tu tienda online o física.
Siguiendo estos pasos, tu contenido evergreen será una herramienta poderosa que atraerá clientes a tu negocio, ya sea online o físico, durante mucho tiempo.
¿Qué tipos de contenido evergreen existen?
Existen varios tipos de contenido evergreen que puedes usar para tu negocio, ya sea online o físico. Aquí te dejo una lista explicada en lenguaje sencillo para que entiendas cómo aprovecharlos:
Guías paso a paso:
Este tipo de contenido explica de manera detallada cómo realizar una tarea o resolver un problema, desglosando cada paso para que sea fácil de seguir. Es ideal porque la gente siempre busca soluciones prácticas en Internet.
Por ejemplo, si tienes una tienda de bricolaje, podrías publicar: “Cómo instalar una lámpara de techo paso a paso”. Explicarías desde las herramientas necesarias hasta los pasos finales. Si tienes una tienda de productos de pastelería, podrías compartir: “Cómo decorar un pastel con herramientas básicas”.
Listas de consejos o tips
Son artículos que ofrecen ideas prácticas o recomendaciones para un tema específico. A las personas les encanta este formato porque es fácil de leer y aplicar, además de ser perfecto para compartir.
Por ejemplo, si tienes una tienda de jardinería, podrías crear un contenido como: “10 consejos para cuidar tus plantas en verano”, incluyendo ideas sobre riego, fertilizantes y exposición al sol. Si tienes una tienda de moda, podrías escribir: “5 consejos para mantener tu ropa como nueva por más tiempo”.
Preguntas frecuentes (FAQs)
Este tipo de contenido responde las dudas más comunes que tienen tus clientes. Es muy útil porque resuelve problemas de manera directa y mejora la experiencia del usuario, ya que encuentran respuestas rápidas.
Por ejemplo, si tienes una tienda de muebles, podrías publicar: “Preguntas frecuentes sobre el montaje de muebles en casa”, con respuestas como: “¿Qué herramientas necesito?” o “¿Cuánto tiempo toma montar una cama?”. Si tienes una tienda de electrónica, podrías hacer algo como: “Resolvemos las dudas más comunes sobre el uso de smartphones”.
Reseñas y comparaciones
Comparar productos o escribir reseñas detalladas es una excelente manera de ayudar a los usuarios a decidirse por lo que necesitan. Este tipo de contenido funciona bien porque la gente busca información antes de comprar.
Por ejemplo, si tienes una tienda de tecnología, podrías escribir: “Diferencias entre un televisor LED y un televisor OLED”. Explicarías las ventajas y desventajas de cada opción. Si tienes una tienda de electrodomésticos, podrías publicar: “¿Qué es mejor para ti: una aspiradora de mano o una tradicional?”.
Definiciones y conceptos básicos
Este tipo de contenido se enfoca en explicar conceptos de manera sencilla, ideal para personas que están buscando aprender algo nuevo. Es muy útil porque responde a preguntas frecuentes y se mantiene relevante a lo largo del tiempo.
Por ejemplo, una tienda de cosméticos podría crear un artículo como: “¿Qué es el ácido hialurónico y cómo se usa?”, explicando sus beneficios para la piel. Si tienes una tienda de productos para mascotas, podrías publicar: “¿Qué es la alimentación BARF y por qué es beneficiosa para los perros?”.
Guías de compra
Este tipo de contenidos ayudan a los usuarios a elegir el producto adecuado según sus necesidades, destacando características clave, beneficios y factores importantes a considerar. Estas guías son muy valiosas porque simplifican el proceso de decisión.
Por ejemplo, una tienda de electrodomésticos podría publicar: “Guía para elegir el mejor refrigerador según el tamaño de tu cocina”, con consejos sobre capacidad, eficiencia energética y diseño. Si tienes una tienda de bicicletas, podrías hacer algo como: “Cómo elegir la bicicleta perfecta según el terreno dónde quieras usarla”.
Tutoriales en video
Los video-tutoriales, aunque son bastante laboriosos, son muy efectivos porque permiten enseñar de forma visual, lo que los hace más fáciles de entender y más atractivos para los usuarios. Además, este formato es ideal para compartir en redes sociales o YouTube.
Por ejemplo, una tienda de ropa podría crear un video titulado: “Cómo combinar prendas básicas para diferentes ocasiones”, mostrando looks casuales, formales y de oficina. Si tienes una ferretería, podrías hacer un tutorial llamado: “Cómo usar un taladro sin cometer errores”.
Listas de recursos
Este tipo de contenido reúne herramientas, productos o materiales recomendados para un propósito específico. Es útil porque los usuarios encuentran todo lo que necesitan en un solo lugar.
Por ejemplo, una tienda de papelería podría publicar: “Los 5 mejores materiales para empezar a dibujar como un profesional”, incluyendo lápices, papeles y rotuladores. Si tienes una tienda de deportes, podrías crear una lista como: “Los accesorios básicos que necesitas para empezar a practicar yoga”.
Artículos inspiracionales o motivacionales
Estos contenidos conectan con las emociones de los usuarios, inspirándolos o motivándolos a lograr algo. Funcionan muy bien porque generan empatía y fidelidad con la marca.
Por ejemplo, una tienda de deportes podría escribir: “Cómo mantenerte motivado para entrenar durante todo el año”, incluyendo consejos prácticos y frases inspiradoras. Si tienes una tienda de libros, podrías publicar: “5 libros que cambiarán tu forma de ver la vida”.
Historias o casos de éxito
Compartir experiencias reales en las que tus productos o servicios hayan sido útiles es una excelente manera de atraer a nuevos clientes y construir confianza.
Por ejemplo, si tienes una tienda de bricolaje, podrías publicar: “Cómo instalar una lámpara paso a paso”. Explicarías desde las herramientas necesarias hasta los pasos finales. Si tienes una tienda de pastelería, podrías compartir: “Cómo decorar un pastel con herramientas básicas”.
Por ejemplo, si tienes una tienda de alimentos saludables, podrías publicar: “Cómo una familia cambió su alimentación y mejoró su salud con nuestros productos naturales”. Si tienes una tienda de muebles, podrías hacer un artículo como: “Antes y después: Cómo nuestros clientes renovaron sus espacios con nuestros sofás y decoraciones”.
Aprovecha el poder del contenido atemporal para tu estrategia SEO
Ya has podido ver que el contenido evergreen es una herramienta imprescindible para garantizar la relevancia y el éxito a largo plazo de tu sitio web. Gracias a su capacidad para atraer tráfico constante y reforzar la autoridad de tu marca, estos materiales se convierten en un activo clave en cualquier estrategia de marketing digital. Si quieres seguir explorando el impacto de elementos básicos en SEO, no te pierdas el post sobre SEO on page, donde conocerás los elementos básicos para mejorar tu visibilidad en las SERPs.